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miércoles, 1 de junio de 2011

MOVIMIENTO 15-M. PUERTA DEL SOL

En Madrid- nave nodriza de todos los movimientos acaecidos en estas últimas dos semanas- el movimiento se ha ido desplazando de la calle a la plaza, de la plaza a los barrios, para regresar de nuevo a la plaza este Domingo y desde allí organizar el desembarco definitivo en los barrios a partir de este semana.


El Sábado fue otro gran día dentro del movimiento 15-M, fue el día en que el movimiento llegaba a los barrios de la capital, se organizaron asambleas en los distintos barrios de todos los distritos de Madrid, en las que poder debatir y poner en común, los temas que más preocupan a los ciudadanos, generados por la gran crisis que está atravesando el país.

Mediante consenso se decidió cuales se llevarían a la asamblea general de los pueblos de Madrid que se celebró un día después, el Domingo, en la Puerta del Sol.
Con la creación de esta asamblea general de los pueblos de Madrid, se pretende dar continuidad al movimiento y extenderlo de forma permanente a toda la capital a través de sus barrios.
A partir de esta semana, se reunirán todos los Sábados a las 12 de la mañana en cada uno de los puntos de encuentro para seguir luchando por una Democracia real.


El Domingo a las 17:00 horas, tenía lugar una asamblea a pocos metros de la Puerta del Sol , en la cual los portavoces de decenas de comisiones- que son las que dan forma al movimiento de Madrid- consensuaban una postura común sobre sí había o no que desmantelar la acampada y posteriormente la llevaban a la asamblea general para ser debatida,esta se celebró a las 20:00 horas y se prolongó hasta pasada la medianoche.





Las decisiones del movimiento 15-M se toman por consenso, no por mayoría, es decir, que con que una persona bloquee cualquier iniciativa, ésta debe ser debatida hasta que alguien ceda.


La mayoría de las comisiones en la reunión previa coincidían en que debían dejar de dormir en la Plaza pero conservando una zona para el trabajo de las comisiones, para la reflexión y como referencia icónica.
ImagenPosteriormente los acampados en la asamblea general del domingo dejaron claro que había varios problemas que ponían en peligro la continuidad de la acampada, entre ellos: el cansancio de las personas que trabajan día y noche en las comisiones, la imposibilidad de llegar a un acuerdo en asambleas muy numerosas o los conflictos violentos que se pueden generar dentro de la "micrópolis".
Además también se tuvo en cuenta el riesgo de desalojo policial. En un último gesto, la comisión de asuntos legales informó que la Policía Nacional, con quienes mantenían un contacto desde hacía días por mandato de la asamblea, les comunicó que : a partir del Martes se rompía la interlocución con la comisión. La asamblea respondió coreando "no tenemos miedo".


Fue una asamblea larga y de las más concurridas. Finalmente se decidió seguir la acampada sin fecha de salida, aunque supeditada la permanencia a cuestiones de seguridad, salubridad y convivencia , temas que las diferentes comisiones han empezado a valorar desde el Lunes, para determinar si tienen arreglo.
La intención final es desmantelar el campamento lo antes posible para poder seguir haciendo asambleas en la plaza y en los barrios sin problemas.


El sistema asambleario en el que se basa el movimiento 15-M ya ha sacado a relucir propuestas en diferentes aspectos,entre ellas destacan las de tipo económico que están directamente asociadas a la actual crisis:


*Aumento del tipo impositivo a las grandes fortunas
*Fin de las SICAV
*Recuperación del Impuesto sobre el Patrimonio
*Control efectivo del fraude fiscal (paraísos fiscales)
*Prohibición de los rescates bancarios
*Elevación de los impuestos a los bancos en directa relación con el daño causado a la sociedad por su mala praxis antes de la crisis económica.
*Expropiación por parte del Estado de las viviendas en stock no vendidas para darles salida como Viviendas de Protección Oficial.
*Restablecimiento del subsidio de 426 euros
*Jubilación a los 65 años, al menos hasta que se solucione el paro juvenil.


No sabemos todavía que es lo que saldrá de todo este movimiento, es demasiado pronto para incluso intuirlo, pero lo que sí está claro ya,es que algo se está moviendo en la sociedad española.


Y lo que ya nadie les podrá negar a este grupo -muy numeroso- de personas  anónimas de todas las condiciones, edades e ideologías, es su capacidad de organización, el valor y el coraje que han demostrado para llevar a cabo sus quejas y propuestas en una sociedad que parecía cada vez más dormida y rendida ante los grandes poderes del Estado y sobre todo la pericia y el buen hacer con el que han dado legitimidad a un movimiento que se está desarrollando de forma pacífica y extraordinariamente democrática y que en apenas dos semanas ha conseguido aunar la voluntad de miles y miles de ciudadanos que han despertado y quieren a día de hoy que el movimiento no se quede solo en un mero acto reivindicativo y pase a ser el principio del fin de la crisis que atraviesa el país en sus múltiples facetas.


Por todo ello y mucho más, no quisiera dejar pasar la oportunidad para manifestar mi más sincera admiración por este movimiento y por las personas que con sus ideas y su capacidad organizativa han conseguido darle forma y desarrollo, aunando voluntades incluso más allá de nuestro país.
Personas anónimas que no buscan el reconocimiento, ni cuotas más o menos grandes de poder, ni inflar sus bolsillos. Personas, que solo buscan una solución de futuro para todos nosotros, de una forma altruista y solidaria, algo a lo que ya no estábamos acostumbrados en los últimos tiempos.


 ¿Héroes?, es demasiado pronto para poder afirmar algo así, pero en este último mes si se ha dejado vislumbrar un cierto aire de heroísmo en sus acciones, sobre todo en los más jóvenes que sin tener un futuro consolidado y mucho que perder, han dejado todo atrás para acampar en unas plazas e incomodar a las grandes autoridades que aunque en un principio se quedaron sin poder de reacción ya no dejan de buscar la manera de desalojarlos y acabar con el movimiento, sin tener que utilizar la fuerza bruta como ya ha ocurrido en Barcelona y Lleida y probablemente también habría ocurrido en Madrid, si las fuerzas de seguridad del Estado no hubieran desoído los llamamientos que se les hacían desde la Comunidad.


YO TAMBIÉN ESTUVE EN LA PUERTA DEL SOL .


 Sólo una mañana, pero pasee por los aledaños y por la Puerta del Sol como hacía mucho tiempo que no lo hacía, con alegría, con confianza y con muchas ganas de absorber todo lo que allí estaba ocurriendo.
Con la misma tranquilidad y serenidad que se respira en Navidades dentro de todo el bullicio y con las mismas ganas de integrarte dentro de él.
Y por cierto, pude incluso comprar con más normalidad y tranquilidad que antes de iniciarse la acampada y sobre todo a unos precios más asequibles, notando además como los comerciantes de la zona estaban más alegres y relajados que de costumbre. 
Las quejas deben venir por parte de los dueños de los grandes comercios, pensé.

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