Los niveles 1 a 3 corresponden a incidentes y los niveles 4 a 7 a accidentes.
Nivel 1 - Anomalía: Problemas de seguridad menores sin impacto en la población o el medio ambiente.
Nivel 2 - Incidente: Exposición de una persona del público por encima de 10 milisieverts (mSv) o de un trabajador por encima de los límites anuales reglamentarios. Niveles de radiación superiores a 50 mSv/h en una zona de operación no prevista.
Nivel 3 - Incidente importante: exposición diez veces superior al límite anual establecido para la exposición de los trabajadores con efectos sanitarios no letales (quemaduras). Contaminación grave en una zona no prevista.
Nivel 4 - Accidente con consecuencias locales: liberación menor de materiales radiactivos. Al menos una muerte por radiación. Fusión de combustible o daño que provoca una liberación superior al 0,1% del inventario del núcleo. Liberación de cantidades considerables de materiales radiactivos dentro de una instalación.
Nivel 5 - Accidente con consecuencias de mayor alcance: liberación limitada de materiales radiactivos. Varios fallecimientos por radiación. Daños graves en el núcleo del reactor. Liberación de grandes cantidades de materiales radiactivos dentro de una instalación, con alta probabilidad de exposición del público, provocada posiblemente por un incendio o un accidente de criticidad grave.
Nivel 6 - Accidente importante: liberación importante de materiales radiactivos, que probablemente requiere la aplicación de las contramedidas previstas.
Nivel 7 - Accidente grave: liberación grave de materiales radiactivos con amplios efectos en la salud y el medio ambiente, que requiere la aplicación y prolongación de las contramedidas previstas.
Todos, de este lado del chaco, veiamos a Japon con un pais que tenia todo bajo control, y no hablo de los desastres naturales, para eso nadie esta preparado, pero si para haber tenido sus plantas nucleares mucho mas actualizadas y seguras.
ResponderEliminarTodo esto solo desnudo que incluso en Japon, ni las agencias mas especializadas trabajan como deberian, ojala ese reactor se pueda controlar, que ya el daño es bastante grave asi como esta.
Estoy de acuerdo, aquí la percepción también era la misma, el país más puntero en el sector de las nuevas tecnologías, la noticia ha debido caer como un jarro de agua fría sobre todo en los sectores más especializados porque aunque una catástrofe natural no se puede prevenir, ya se tenía constancia de que la empresa que gestionaba la central no estaba actuando con todo el rigor que se debería tener en este tipo de instalaciones y al tratarse de Japón no presionaron demasiado para que se dieran prisa en subsanarlas.
ResponderEliminarAl final, la misma la historia de siempre, que viene el lobo, que viene el lobo y el lobo llegó.
Si se pudo controlar la zona dañada en Chernobyl es más que probable que se pueda controlar en Fukushima, con permiso de nuevas catástrofes naturales, pero ya está claro que va a ser un nuevo infierno en el planeta durante demasiados años.
Saludos