LUNES, 2 MAYO 2011
Un joven sostiene en alto un cartel entre la muchedumbre que se dio cita esta madrugada en la 'Zona Cero' para celebrar la muerte de Osama bin Laden. / Andrew Gombert (Efe)
(Actualización de las 16:00 horas: nuevos testimonios y datos adicionales de la operación)
(Actualización de las 20:00 horas con declaraciones de Rudy Giuliani)
NUEVA YORK.– Con gritos de “¡U-S-A, U-S-A!” despertó este lunes la Zona Cero de Manhattan, con grupos de jóvenes terminando la celebración de toda una noche de júbilo tras el anuncio de la muerte del hombre más buscado del mundo.
Mapa de la situación de Abottabad en relación con la capital, Islamabad. / Google maps
Casi diez años después de los atentados que destruyeron esta zona y cambiaron fundamentalmente el curso de la historia, Osama bin Laden, líder de la organización Al Qaeda, responsable de la tragedia del 11 de septiembre, murió ayer tras un ataque de las fuerzas especiales estadounidenses en un complejo residencial de Abbotabad, una ciudad a 120 kilómetros de Islamabad, capital de Pakistán.
Un disparo en la cabeza terminó con su vida, según fuentes oficiales. Su cuerpo fue sepultado en el mar.
La operación que acabó con la muerte del líder terrorista llevaba semanas siendo preparada. Desde marzo, Obama condujo diferentes reuniones con sus más cercanos colaboradores en materia de seguridad nacional mientras se cerraba el cerco. El líder terrorista habitaba una gran vivienda sin conexiones de televisión o internet, en un amplio complejo residencial. El viernes, el presidente dio luz verde para emprender la operación. Las autoridades estadounidenses sólo informaron a las paquistaníes una vez la operación había sido iniciada en la madrugada del domingo.
Según fuentes oficiales, Bin Laden y varias personas que se encontraban con él, mostraron fuerte resistencia. Tras un intenso tiroteo, todos fueron abatidos, y su cuerpo transportado en helicóptero a Afganistán. Pruebas de ADN certificaron su identidad.
Las autoridades de Estados Unidos están en alerta por posibles represalias, tanto dentro como fuera del país, si bien no han identificado ningún tipo de amenaza inmediata.
En un discurso poco antes de la medianoche, el presidente Obama anunciaba al país que horas antes había dado instrucciones de matar a Bin Laden, después de meses de búsqueda y localización en un complejo a las afueras de la capital paquistaní.
Obama, anoche, durante la comparecencia en la que anunció la muerte de Bin Laden. / Chuck Kennedy (whitehouse.gov)
“Se ha hecho justicia”, dijo Obama antes de la medianoche, añadiendo que Estados Unidos logra todo lo que se propone. También quiso enfatizar que Estados Unidos no está en guerra con el Islam, sino con Al Qaeda.
Obama habló, una vez concluyó la operación, con el ex-presidente George W. Bush, que buscó sin éxito este desenlace. Sus ocho años en la Casa Blanca estuvieron fuertemente marcados por las muertes en el Bajo Manhattan, el Pentágono y Pensilvania, lugares donde los terroristas estrellaron los aviones aquella soleada mañana de Septiembre de 2001. A diferencia de su predecesor, Obama no utilizó este domingo la expresión “Guerra contra el Terror”, prefiriendo en cambio “Guerra contra Al Qaeda”.
“La persona que era responsable de esto ya no está, se fue”, opina Mesías Tenesaca, ecuatoriano, obrero de la construcción en la Torre de la Libertad. Se enteraba de la noticia por la mañana, camino del trabajo. Dice que el ambiente será festivo hoy con sus compañeros. “Algo bueno que hablar, discutir”.
Convocados por los medios de comunicación, algunos familiares de víctimas del 11 de Septiembre se acercaron al sitio del World Trade Center. “Al final he llegado a la conclusión de que lejos de alegrarme, siento dolor por la muerte de este señor”, dice con ojos llorosos Prudencio Lemagne, que perdió a su hijo David, de 27 años, policía de la Autoridad Portuaria. “No le dio tiempo a ver las torres que se están construyendo”, símbolo, dice, de que “este país siempre logra recuperarse”.
También se acercó a las cámaras el que fuera alcalde de Nueva York aquel 11 de Septiembre, que en ocasiones ha criticado la política de seguridad del presidente Obama. “Tomó mucha valentía dar la orden”, dice Rudy Giuliani de Obama, que autorizó la ejecución de Bin Laden, a la vez que señala que sin el trabajo anterior de George W. Bush, esta operación no habría sido posible. También mostró cautela: “Esto no es el final de la Segunda Gerra Mundial. Es una victoria, como derrotar a un Hitler o a un Stalin”.
La muerte del líder terrorista marca el fin de un ciclo, ofreciendo un necesario cierre emocional a un país – y quizá a todo un mundo- que nunca volvió a ser el mismo.
Oprima el 2, de JUAN MANUEL BENÍTEZ
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