De acuerdo a un modelo probabilístico que ellos crearon, había un 80'9% de oportunidades de que bin Laden estuviera oculto en Abbotabad, Pakistan, donde el murió la pasada noche. Y ellos predijeron correctamente que el estaría en una gran ciudad no en una cueva.
Basándose en información desde satélites y otros sistemas de detección remota, y con el informe de sus movimientos desde su última ubicación conocida, los estudiantes crearon un modelo probabilístico de donde era probable que él estuviera.
Sus predicciones de una ciudad estuvieron basadas en una teoría geográfica llamada "biogeografía de islas": la cual básicamente expone que una especie de una gran isla es mucho menos probable que se extinga siguiendo un evento catastrófico que una especie de una pequeña.
"No es mi obsesión hacer este tipo de cosas (sobre el terrorismo), el dijo, "pero las mismas teorías que usamos para estudiar pájaros en peligro de extinción pueden ser usadas para hacer esto".
Los estudiantes de pregrado hicieron un buen trabajo en el proyecto, Gillespie dice que el escribió los resultados en un artículo y los presentó a una revista pequeña, MIT International Review.
Los días siguientes, él se sorprendió mucho porque encontró su bandeja de entrada llena de peticiones de entrevistadores de todo el mundo, desde el USA Today a Sean Hannity (él declinó ésta última).
Las predicciones precisas del artículo fueron tratadas con algunos escépticos y otros investigadores, que dicen los autores tuvieron un exceso de confianza en predecir desde los agujeros de el terrorismo hasta edificios específicos. Gillespie dice que una de sus debilidades fue una falta de datos sólidos en la localización de bin Laden, la última conocida en 2001.
Sobre como las agencias de inteligencia tomaron interés en su trabajo, dice: "Yo no he oído de ellos, no lo esperaba". Pero ellos obviamente hicieron un trabajo muy bueno.
Además, el último líder de Al Qaeda hizo una mala elección de sus bienes reales, en opinión de Gillespie. "Una casa discreta habría sido más adecuada para él "
Encontrar diputados de bin Laden - el cerebro terrorista se dice que es solo una de las 40 dianas de "alto-valor" que el Pentágono busca - no está en la lista de tareas pendientes de Gillespie.
"Justo ahora, yo estoy trabajando en los bosques secos de Hawai donde el 45% de los árboles está en la lista de especies en extinción", dice Gillespie:
"Yo estoy más interesado de lejos, en conseguir sacar árboles de la lista de especies en extinción".
Si yo fuera Gillespie, aunque suene antipopular, también estaría más interesada en salvar árboles en peligro de extinción porque aunque los efectos de la desertización de los bosques se hace notar a más largo plazo, la deforestación también mata.
Interesante. Muy cierto.
ResponderEliminarSaludos.
Estoy casi segura de que va a haber tema para el resto de siglo.
ResponderEliminarMás aún como no enseñen el cadaver, correrán rios de tinta.
Saludos de Amazona.